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Mary Ann Malone
Edad: 28
Ocupación: Costurera de día, carterista de noche (o cuando se le presenta la oportunidad)
Biografía: Mary Ann Ryan nació en el condado de Kilkenny, en Irlanda. Tercera hija de cinco, fue la encargada, cuando su madre murió de fiebres puerperales al dar a luz al más pequeño de los hermanos de Mary, de sacar adelante la casa y la familia. Así que tuvo que crecer muy rápido para ayudar en casa y también hacerse con un trabajo lo antes que pudo y echar una mano a la deficiente economía familiar. Tan pronto cumplió dieciocho años, su familia le arregló un matrimonio con Herbert Malone, un gran amigo de su hermano mayor. La razón era sencilla: una boca menos que alimentar. Mary aceptó con la esperanza de que salir de su familia sería un nuevo comienzo, pero no fue así.
Mary siempre había sido una chica realista. Sabía que Herbert no iba a ser un príncipe azul ni el matrimonio un camino de rosas, pero tampoco se esperaba que las cosas fueran como fueron. Lejos de casa, en Dublín, con un marido que bebía mucho, ganaba poco dinero e insistía en que ella era una mujer incompleta porque no lograba darle hijos. En el fondo, Mary se alegraba. Ningún hijo debía nacer de un momento en el que su padre se sacudía sobre su madre, tapándole la cara con una almohada y diciéndole "no mires, guarra". Al menos Herbert nunca llegó a pegarle. La utilizaba como fuente de ingresos (Mary trabajó como criada, niñera, empleada de una fábrica textil, haciendo arreglos de costura a domicilio), como furcia y como descarga de sus frustaciones, pero nada más. Pero el día que le dijo que no era mujer, por su aparente esterilidad, esperó a que volviese hasta las cejas de cerveza y cuando le oyó caer dormido, recogió sus cosas y se marchó. Durmió una noche en el puerto de Dun Laoghaire y a la mañana siguiente embarcó rumbo a Inglaterra. De allí, a ratos caminando, a ratos pidiendo ayuda a los carros que pasaban, llegó a Londres. Se instaló en el barrio de Whitechapel, donde ha vivido dos años en una habitación de pensión miserable, saliendo y entrando de trabajos varios y apenas consiguiendo lo justo para vivir.
Hace unos meses se acordó de una habilidad suya. Cuando Herbert estaba dormido, o borracho, o quería hacer uso de sus derechos como marido, era increíblemente fácil acercarse a él y vaciarle la cartera para evitar que se fundiera el sueldo del mes. La desesperación hace muchas cosas, y entre ellas, ha hecho que Mary considere esta su segunda profesión. Sale por las noches, embauca a los hombres y con un par de coqueteos los despoja de su dinero. Luego tira las carteras, dejando todo excepto el dinero... borrando rastros.
Personalidad: Aunque Mary Ann parezca tranquila y complaciente, dentro de ella hay una furia y una fuerza que no deja salir, pero le ayuda mucho a tirar adelante en los momentos difíciles. Resignada y muy dispuesta, es la primera que hace las cosas complicadas que nadie quiere hacer pero son necesarias. Odia quejarse y a la gente que se queja por nada.
Relación con otros personajes: Abierta
Imagen: Jennifer Conelly
Llevado por: Sara
Edad: 28
Ocupación: Costurera de día, carterista de noche (o cuando se le presenta la oportunidad)
Biografía: Mary Ann Ryan nació en el condado de Kilkenny, en Irlanda. Tercera hija de cinco, fue la encargada, cuando su madre murió de fiebres puerperales al dar a luz al más pequeño de los hermanos de Mary, de sacar adelante la casa y la familia. Así que tuvo que crecer muy rápido para ayudar en casa y también hacerse con un trabajo lo antes que pudo y echar una mano a la deficiente economía familiar. Tan pronto cumplió dieciocho años, su familia le arregló un matrimonio con Herbert Malone, un gran amigo de su hermano mayor. La razón era sencilla: una boca menos que alimentar. Mary aceptó con la esperanza de que salir de su familia sería un nuevo comienzo, pero no fue así.
Mary siempre había sido una chica realista. Sabía que Herbert no iba a ser un príncipe azul ni el matrimonio un camino de rosas, pero tampoco se esperaba que las cosas fueran como fueron. Lejos de casa, en Dublín, con un marido que bebía mucho, ganaba poco dinero e insistía en que ella era una mujer incompleta porque no lograba darle hijos. En el fondo, Mary se alegraba. Ningún hijo debía nacer de un momento en el que su padre se sacudía sobre su madre, tapándole la cara con una almohada y diciéndole "no mires, guarra". Al menos Herbert nunca llegó a pegarle. La utilizaba como fuente de ingresos (Mary trabajó como criada, niñera, empleada de una fábrica textil, haciendo arreglos de costura a domicilio), como furcia y como descarga de sus frustaciones, pero nada más. Pero el día que le dijo que no era mujer, por su aparente esterilidad, esperó a que volviese hasta las cejas de cerveza y cuando le oyó caer dormido, recogió sus cosas y se marchó. Durmió una noche en el puerto de Dun Laoghaire y a la mañana siguiente embarcó rumbo a Inglaterra. De allí, a ratos caminando, a ratos pidiendo ayuda a los carros que pasaban, llegó a Londres. Se instaló en el barrio de Whitechapel, donde ha vivido dos años en una habitación de pensión miserable, saliendo y entrando de trabajos varios y apenas consiguiendo lo justo para vivir.
Hace unos meses se acordó de una habilidad suya. Cuando Herbert estaba dormido, o borracho, o quería hacer uso de sus derechos como marido, era increíblemente fácil acercarse a él y vaciarle la cartera para evitar que se fundiera el sueldo del mes. La desesperación hace muchas cosas, y entre ellas, ha hecho que Mary considere esta su segunda profesión. Sale por las noches, embauca a los hombres y con un par de coqueteos los despoja de su dinero. Luego tira las carteras, dejando todo excepto el dinero... borrando rastros.
Personalidad: Aunque Mary Ann parezca tranquila y complaciente, dentro de ella hay una furia y una fuerza que no deja salir, pero le ayuda mucho a tirar adelante en los momentos difíciles. Resignada y muy dispuesta, es la primera que hace las cosas complicadas que nadie quiere hacer pero son necesarias. Odia quejarse y a la gente que se queja por nada.
Relación con otros personajes: Abierta
Imagen: Jennifer Conelly
Llevado por: Sara